La organización Unións Agrarias denuncia la política comercial que está desarrollando la cadena Mercadona para condicionar artificialmente los precios de la leche en sus establecimientos a la negociación de los nuevos contratos de suministro en origen con los productores, ya que la empresa valenciana tiene con 30 % del mercado lácteo español.

A pesar de la situación extrema en la que se encuentran las explotaciones ganaderas de Galicia, con subidas de la luz del 69% y de la factura de la alimentación del 39% respecto al año pasado y de más del 25% respecto a enero de este mismo año, Mercadona sigue congelando el precio de la sus briks de leche en los lineales con una clara estrategia de utilizarlo como producto de reclamo lo que contraviene totalmente la Ley de la Cadena Alimentaria, denuncia desde UUAA. Así, mientras otras cadenas de distribución han equilibrado el PVP del cartón de leche con la nueva situación de los costes del agricultor, Mercadona sigue forzando precios anormalmente bajos para mejorar su cuenta de pérdidas y ganancias.

Para la organización, esta estrategia, si no se corrige, puede contagiar al resto de áreas comerciales para que utilicen las ventas a pérdida, alterando gravemente el mercado y toda la cadena de valor de la leche. Hay que recordar que este es uno de los productos más utilizados como “gancho” para engañar al consumidor con falsas promociones y al mismo tiempo asfixiar a los agricultores en momentos en que la pérdida del 30% de la cosecha de maíz por sequía hace que las fincas más vulnerables tienen que depender de piensos que actualmente se cotizan a más de 410 euros la tonelada.

La producción de leche en Galicia se ha reducido en 10.400 t en los últimos tiempos, situación que sin duda deriva de las pérdidas que las explotaciones gallegas vienen registrando mes tras mes por los bajos precios que sufre la leche en origen. De media y respecto a la producción española (46 cts/l), aquí un agricultor cobra 2 céntimos menos (44 cts/l), lo que condena a Galicia a estar al fondo de las comunidades autónomas. Además, muchos productores están muy por debajo de este promedio, especialmente aquellos con propiedades más pequeñas.

Galicia cuenta con el 55% de los ganaderos lecheros de España.