Los censos de porcino de EEUU correspondientes al mes de junio han mostrado un descenso de un 3% en el número de reproductoras y se espera que la reducción continúe hasta final del año. No obstante, este descenso en el número de madres podría no ser suficiente para volver a recuperar la rentabilidad en el sector.

La oferta de carne no tiene porqué verse disminuida debido a los aumentos de la productividad y el incremento del peso al sacrificio. Los ganaderos han sacrificado a sus cerdas menos productivas, por lo que ha aumentado la productividad de la explotación. En EEUU, en el primer semestre, el tamaño de la camada ha aumentado en un 2,5% en relación con el mismo período del año anterior, mientras que en la última década, el aumento del tamaño de la camada ha sido solo de un 0,8%.

Los analistas estiman que la esperanza de que la rentabilidad de las explotaciones aumente radica en que descienda el precio de los cereales. Los precios del maíz parece que están empezando a bajar y también es probable que desciendan los de la soja cuando se disponga de la nueva cosecha.