La empresa de tractores John Deere ha anunciado que despediría a 503 trabajadores en Illinois, estado donde tiene la sede central y a 310 en Iowa, ya que se enfrenta con costes operativos crecientes y una demanda en declive. Asimismo ha anunciado que trasladaría a México parte de la producción que anteriormente se realizaba en los EEUU, según recoge Bloomberg.

Donald Trump, candidato republicano a las próximas elecciones presidenciales en EEUU, durante un acto de su campaña electoral en Pennsylvania, se mostró muy duro con la decisión del fabricante de tractores. «Piensan que van a fabricar productos más baratos en México y venderlos al mismo precio que antes para ganar mucho dinero deshaciéndose de nuestra mano de obra y nuestros empleos», afirmó enérgicamente Trump. «Si van a hacer eso, entonces vamos a imponer un arancel del 200% a todo lo que quieran enviar de regreso a Estados Unidos».

Según el anuncio electoral, si Trump resultara elegido, impondría un arancel del 200% a los equipos que John Deere fabricara en México y que anteriormente se producían en EEUU y que quisiera vender en el mercado estadounidense.

Trump ya ha dicho con frecuencia que impondría un arancel del 200% a los fabricantes de automóviles que trasladen su producción a México, pero ésta parece ser la primera vez que extiende esa amenaza a una empresa de equipos agrícolas.