Los precios del porcino en la UE se han estancado porque aunque las ofertas son bajas, el comercio es insuficiente. El consumo interno es bajo por la caída del poder adquisitivo y las exportaciones están ralentizadas por una demanda importadora desacelerada y que busca precios más atractivos.

Es Alemania, se renovó el precio por segunda semana consecutiva. Los analistas creen que habrá que esperar a Semana Santa y al inicio de la temporada de parrilladas para ver un repunte en el precio.

En Bélgica, estabilidad en el precio. El comercio de lechones parece más interesante a medida que los precios aumentan de manera más significativa, lo que podría generar más exportaciones de lechones y, en el futuro, una falta de cerdos para el mercado interno.

En Francia, el precio ha aumentado 1,5 ct, con una demanda que parece correcta. Los volúmenes sacrificados ascendieron a 344.232 cerdos, un nivel bastante similar a la actividad del año anterior. Los pesos tampoco han cambiado mucho: 96,47 kg (+16 g).

En España, la demanda de los mataderos sigue siendo fuerte de cara a la Semana Santa. Los pesos han estado bajando desde hace 7 semanas, pero siguen siendo 1,5 kg más altos que el año pasado. Actualmente los sacrificios tienden a ralentizarse pero por el momento, el nivel es superior al de 2023 pero inferior al de 2022.

En Italia, el mercado no muestra grandes cambios con ofertas bajas y demanda típica de la temporada. Este saldo provisional da como resultado un precio que sólo aumenta unas pocas milésimas.

En Estados Unidos, la subida del precio de la carne de cerdo no decae. El precio supera actualmente el nivel de 2023, pero aún está muy por detrás del de 2022. Los sacrificios marcaron un descenso de 93.000 cerdos en la semana 10. El precio de la carne de cerdo es favorable con respecto al de la carne vacuna y el pollo, lo que favorece la demanda interna o externa. Las exportaciones totales de productos porcinos en el mes de enero aumentaron un 6,2%.

En China, el precio de la carne de cerdo cambia relativamente poco y se situó a finales de semana en 14,58 CNY (1,86 euros). La oferta de carne de cerdo tiende actualmente a disminuir, lo que favorece un ligero aumento de los precios, aunque a un nivel todavía muy bajo.