El mes de enero suele ser habitualmente un mes flojo de demanda. Este año, esta debilidad es aún mayor, con un mercado todavía muy afectado por el Covid. En el norte de Europa, el comercio no se ha reactivado a pesar de la bajada generalizada de precios en la semana precedente.

En Alemania, el precio ha repetido a 1,20 €/kg canal y parece que es un precio que cuenta con el beneplácito de los mataderos. La situación alemana es la misma desde hace meses. El mercado atraviesa serias dificultades por la ausencia de exportaciones a Asia por la PPA y por una demanda interna lastrada por el Covid.

En Dinamarca, el precio ha bajado 3 céntimos, que junto a los 4 céntimos perdidos en la anterior supone un descenso acumulado de 7 cts en dos semanas. No obstante, el precio previsto para la semana 5, se mantendrá igual. El mercado danés está muy afectado por el descenso de las exportaciones a China, aunque ha mantenido muy buen ritmo en los envíos hacia Japón, Corea del Sur y Filipinas, entre otros.

En España ha subido el precio, favorecido por un descenso del peso de las canales que ha reducido la oferta. Las industrias, a la espera de que se reactive la demanda, están aprovechando para congelar a precios bajos, como es tradicional en esta época del año.

En Italia, el precio ha vuelto a bajar. Aunque no se han registrado nuevos casos de PPA, la situación se está poniendo complicada, ya que los productores de jamón han dejado de comprar piezas en toda la región de Piamonte (donde se han producido los casos).

En EEUU continúa la tendencia alcista del precio de la carne de cerdo. Los sacrificios de la semana 3 aumentaron en un 3 % en comparación con la semana anterior, pero durante las tres primeras semanas del año, los sacrificios disminuyeron casi un 10 %. Según un estudio de la Universidad de Iowa, una explotación de ciclo cerrado generó un beneficio de 27,55 $ por cerdo vendido en 2021. Este ha sido el año más rentable desde 2014.

En China, los precios siguen rondando el equivalente a 1,98 €/kg vivo. Las importaciones chinas de carne fresca y congelada para el año 2021 ascendieron a cerca de 3.600.000 toneladas, lo que supone un descenso del 17% en relación con el año anterior, según los datos de If.