Al igual que la semana pasada, en esta semana los precios del porcino en los países del norte de la UE se mantienen estables, mientras que en los del sur se confirma la bajada. A finales de agosto, con el fin de las vacaciones estivales y la vuelta al colegio, se invierte la tendencia en la demanda que se registró a principios de julio: los turistas abandonan los países del sur, que regresan al norte. Por tanto, tanto norte como sur están en vías de recuperar sus niveles de población habituales y por tanto, sus habituales niveles de demanda de carne de porcino.

En Alemania, el precio del porcino se mantiene en 1,70 €/kg por séptima semana consecutiva. Los mataderos se quejan de falta de demanda interna y de exportación, por lo que están recurriendo al almacenamiento. La estabilidad alemana se ha transmitido a los países vecinos, como Bélgica, Dinamarca, Austria y Países Bajos, que suelen seguir su tendencia.

En los países del sur, la partida de los turistas ha hecho que la demanda se desplome y que caigan los precios. En España, el precio se ha reducido en 1,4 céntimos/kg vivo y en Italia en 2 céntimos/kg canal. Al descenso de la demanda hay que unir una bajada de las temperaturas por la noche, lo que está favoreciendo el crecimiento de los cerdos y por tanto, el aumento de la oferta, lo que podría conducir a un futuro recorte de precios.

En Italia, aunque el precio ha bajado, la situación sigue siendo satisfactoria después de alcanzar un máximo histórico durante el mes de agosto.