La organización agraria británica NFU se opone a que la ayuda directa que se prevé en la propuesta de Reforma de la OCM del azúcar actualmente en discusión, se pueda gestionar de otra forma diferente a una integración total en el Pago Único, rechazando cualquier posibilidad de una aplicación parcial, relacionándola con el cultivo de remolacha, según ha declarado el presidente de la sectorial remolachera de la NFU, Mike Blacher durante el evento del sector remolachero británico, Beet UK.

La oposición no se refiere a la aplicación en el Reino Unido, sino a la posibilidad de que pueda aplicarse en otros países de la UE, ya que un eventual acoplamiento de la ayuda podría hacer que “países ineficientes pudieran seguir cultivando remolacha y produciendo azúcar”, lo que supondría un perjuicio para el sector británico, uno ed los más competitivos de Europa, que piensa quedarse con los mercados que deejn libe los países “ineficientes” que se verán abocados a que desaparezca su producción.

Por otra parte, la NFU defiende que no se hagan recortes de cuota en ningún caso y que toda producción de remolacha que haya que hacer sea por la vía de bajar los precios y de favorecer a los productores más competitivos, entre los que se encuentran.