Científicos del Servicio de Investigación Agraria de EEUU (ARS) y de la Universidad de Anadolou (Turquía) han descubierto que algunos aceites de plantas medicinales y aromáticas tienen una capacidad insecticida sobre los pulgones superior a los que se utilizan actualmente como pesticidas biológicos.

Se ha evaluado la actividad contra el pulgón de las crucíferas (Lipaphis pseudobrassicae) de los aceites esenciales de 25 especies de plantas, encontrándose que 17 son más eficaces que los aceites de menta o romero, que son los que emplean comúnmente, especialmente en la agricultura biológica.

El aceite de las plantas de los géneros Bifora, Satureja y Salvia son los que han mostrado una mayor acción insecticida. Bifora radians, una mala hierba común de los cereales en España es la que ha mostrado una mayor toxicidad para los pulgones.