La Comisión Europea ha autorizado la elaboración de alcohol vínico para uso de boca de algo más de 4,7 millones de hectolitros de vino de mesa de Castilla-La Mancha para la campaña 2006-2007, en el marco de las ayudas establecidas en la actual OCM del vino.

En virtud de esta autorización, la Consejería de Agricultura estima que se pagarán ayudas por un montante aproximado de 110 millones de euros, lo que supone una cantidad similar a la percibida en otras campañas.

En cuanto a la distribución territorial, la provincia de Ciudad Real será la que recibirá un mayor porcentaje de dichos fondos, con el 39% de los pagos para 1,8 millones de hectolitros de vino de mesa autorizados. Le sigue Toledo, con un 26% para 1,2 millones de hectolitros de vino de mesa autorizados.

La provincia de Cuenca recibirá un 18% como consecuencia de la transformación en alcohol vínico de 846.000 hectolitros de vino autorizados, mientras que en Albacete se abonará otro 18% por la transformación de 832.000 hectolitros.

Castilla-La Mancha es la región que participa en un mayor porcentaje de esta medida, ya que representa cerca del 68% del volumen de vino de mesa contratado en toda España.

El principal destino del alcohol vínico de uso de boca en nuestra comunidad autónoma es la fabricación de brandy. De hecho, el 80% del alcohol vínico que se utiliza para la elaboración de brandy de Jerez procede de Castilla-La Mancha.

Este tipo de transformación del vino de mesa en alcohol vínico, cuya regulación se contempla en el artículo 29 del Reglamento Comunitario 1493/1999, tiene por objeto apoyar el mercado vitivinícola y facilitar el mantenimiento del suministro de productos de la destilación de vino de los segmentos del sector del alcohol de boca, al constituir una salida tradicional importante de dichos productos.

Todo productor que tenga intención de entregar vino de su propia producción a un destilador en este marco, firmará contratos de entrega con un destilador, que deberán ser autorizados por las Delegaciones Provinciales de Agricultura previamente al inicio de las entregas del vino.

Una vez realizadas las comprobaciones correspondientes, las Delegaciones Provinciales autorizan la transformación en alcohol vínico del 40% del volumen de vino de mesa solicitado, sobre el cual se puede pedir el pago de un anticipo. Posteriormente, se realizará la autorización definitiva aplicándose el porcentaje de prorrateo que ha establecido la Comisión Europea y que para esta campaña 2006-07 es del 86,99%