La prestigiosa revista de asuntos internacionales “Foreign affairs” ha publicado online un artículo de dos profesores de la Universidad de Minessota titulado How Biofuels Could Starve the Poor (como los bikocarburantes pueden hacer pasar hambre a los más pobres) en el que advierten sobre el grave riesgo de que el actual auge de los biocarburante tenga como consecuencia indirecta el mayor precio de los alimentos y una mayor inseguridad alimentaria que fragilizaría aun más la economía y nutrición de los más pobres.

El pasado mes de marzo, el precio del maíz en EEUU alcanzó su mayor nivel desde hace diez años y las cotizaciones siguen estando altas a pesar de que se prevén plantaciones y cosechas récords en esta campaña. Esta alzas se trasladan a todos los alimentos del mundo en mayor o menor medida, según los autores, con la consecuencia de unos precios mayores para el consumidor, que en el mundo desarrollado son asumibles en muchos casos, pero que puede tener consecuencias graves para los más desfavorecidos. El informe advierte también de las consecuencias medioambientales, derivadas de aumentar la superficie puesta en cultivo para atender la creciente demanda, que en muchos casos se puede hacer a costa de zonas sensibles o de espacios naturales.

Además de lo anterior, existen actualmente una serie de presiones especulativas, que los autores denominan “biofuelmanía” que hace que fondos e inversiones estén tomando posiciones en el sector bioenergéticos, haciendo aumentar más aun los precios.