Un año más llegamos a una fecha tan señalada para nosotras como el 15 de octubre, Día Internacional de la Mujer Rural, con esperanza e ilusión en el futuro. Con ilusión porque año tras año vamos alcanzando nuevos logros, avanzando poquito a poco hacia la consecución de nuestras metas, haciendo que, día a día, las mujeres rurales cobren el protagonismo y el reconocimiento que se merecen y que muchas veces ha quedado oculto.

Siempre he dicho que las mujeres hemos sido protagonistas en el último siglo de una revolución silenciosa, pero efectiva, y las mujeres rurales lo han sido mucho más porque si difícil ha sido ir logrando mayores niveles de igualdad en las ciudades, en el medio rural los obstáculos han sido y siguen siendo hoy en día muchísimo mayores.

Por eso, con el objetivo de realzar la figura de las mujeres rurales, que son el alma del desarrollo de nuestros pueblos, hace doce años, en la Conferencia Mundial de la Mujer de Pekín en 1995 desde AFAMMER pedimos que se instituyera el 15 de octubre como Día Internacional de la Mujer Rural, una petición que fue escuchada y por ello celebramos ya desde hace una década esta jornada.

Una jornada en la que, año tras año, seguimos planteando nuestras necesidades, nuestras preocupaciones y nuestras reivindicaciones. Y también, como no podía ser de otra manera, nuestras esperanzas.

Porque aunque hemos avanzado, hoy todavía no podemos hablar de igualdad real de oportunidades para las mujeres del medio rural ni para nuestros pueblos. Porque las mujeres del medio rural todavía son minoría en gran parte de España en la titularidad de las explotaciones agrarias. Porque el desempleo afecta en un 75% a las mujeres rurales. Porque en el medio rural conciliar la vida familiar, laboral y personal sigue siendo la principal traba a la hora de que las mujeres puedan acceder a un puesto de trabajo. Porque la mejora de la sanidad, la educación, el transporte, las infraestructuras, el acceso a las nuevas tecnologías de la comunicación y la información siguen siendo nuestros principales caballos de batalla para lograr el verdadero desarrollo del mundo rural.

Por todo eso celebramos el Día Internacional de la Mujer Rural y porque creemos que las mujeres rurales representan el pasado, el presente y, sobre todo, el futuro de nuestros pueblos.

Por eso, para AFAMMER y las mujeres que formamos parte de esta organización no gubernamental este día es tan especial y lo es más aún este año en el que cumplimos nuestro XXV Aniversario. Veinticinco años llevando la voz de las mujeres rurales, de esas mujeres trabajadoras en las explotaciones agrarias y ganaderas, emprendedoras, cuidadoras de sus mayores y de sus hijos, mujeres todas ellas orgullosas de su pasado y de su presente y que miran con esperanza hacia el futuro.

Carmen Quintanilla Barba
Presidenta Nacional de AFAMMER