El Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, a través de la Secretaria del Observatorio de Precios de los Alimentos, se ha reunido durante los últimos días con representantes de las asociaciones de productores, de la industria, de la distribución comercial y de los consumidores, para contrastar los estudios de análisis de la cadena de valor de algunos alimentos, concretamente los cítricos, la leche y la carne de ovino, con objeto de difundir su conocimiento tanto entre los operadores de la cadena alimentaria como entre los consumidores.

Estos análisis de la cadena de comercialización, y del proceso de formación de precios de los alimentos, serán presentados en la próxima reunión del Pleno del Observatorio de Precios de los Alimentos, que tendrá lugar el próximo día 29.

Se da cumplimiento así a la Proposición no de Ley, aprobada el pasado 9 de diciembre de 2008 en el Pleno del Congreso de los Diputados, relativa a medidas a adoptar para conocer la formación de precios de productos alimenticios no elaborados, desde el productor al consumidor final, acodándose para ello instar al Gobierno a configurar un Grupo de Trabajo entre el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio y la Empresa Nacional MERCASA, para proceder al estudio de la Cadena de Valor de los principales productos de alimentación no elaborados, Grupo que quedó formalmente constituido el pasado 20 de enero en la sede del MARM.

En el marco de esta proposición no de ley, el MARM ha mantenido diversas reuniones para contrastar los resultados de los distintos estudios con los representantes de los distintos agentes de la cadena de valor antes de su presentación oficial, dentro del espíritu de transparencia y colaboración del Observatorio de Precios de los Alimentos.

Estas actuaciones se enmarcan en la línea de los compromisos del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino para fomentar la transparencia de la información sobre el mercado alimentario y mejorar el conocimiento sobre la estructura de los diferentes eslabones de la cadena alimentaria, favoreciendo también la realización de estudios específicos y dinámicos para poner en relieve el proceso de formación de la cadena de valor y potenciar la información cara al consumidor.