Más de la mitad de los estadounidenses han cambiado sus hábitos de compra de carne durante este año en relación con el pasado, debido a la crisis. Para ahorrar dinero en la bolsa de la compra, el 71% lee los carteles del super. Un 67% siempre que compra carne, adquiere los cortes más baratos o lo hace frecuentemente. Un 69% aprovecha las ofertas y compra en exceso para almacenar en casa. Otros optan por comprar pasta con lo que reducen el consumo de carne.
Estas cifras proceden de una encuesta on line realizada por el Instituto Americano de la Carne y el Instituto de Comercio de Productos alimentarios de EEUU. En total, se encuestaron a 1.059 consumidores.
Además, la crisis también ha cambiado los hábitos de los consumidores. Estos están saliendo menos a comer fuera y cocinando más. El nivel de gasto no ha variado, se mantiene en 70,5 € por semana, pero lo que si ha cambiado es la forma de gastarlos. La encuesta ha puesto de manifiesto que un 50% de los encuestados, utilizan cupones de descuentos cuando les es posible, compran solo lo que necesitan y preferiblemente marcas blancas.