En el pasado, muchas epidemias de influenza humana con origen animal han sido nombradas usando su nombre geográfico, como por ejemplo, la gripe española, la influenza asiática. Por este motivo, la Organización de Sanidad Animal (OIE) considera que el virus que ahora circula por EEUU y México debería denominarse influenza norteamericana.

Dicho virus, según la OIE, no es un virus clásico de la influenza humana. Es un virus que incluye entre sus características virales, componentes porcinos, avícolas y humanos.

La OIE considera que hay que iniciar una investigación para conocer la susceptibilidad de los animales a este nuevo virus. Habría que implementar medidas de bioseguridad, incluyendo una posible vacunación para proteger a los animales susceptibles. Si se comprobara que este virus puede causar enfermedad en los animales, la circulación viral podría empeorar la salud publica regional y global. No obstante, solamente se han encontrado casos relacionados con la circulación de este virus en los cerdos en zonas de los países que están teniendo casos humanos.