Las tormentas de granizo que han sacudido en las últimas horas a varios municipios de las provincias de Valladolid, Salamanca, Ávila, Palencia, Soria, Zamora y Burgos han provocado serios daños a algunos cultivos agrícolas más relevantes en la región.

En comarcas como La Moraña, Medina del Campo, Saldaña-Valdavia, Duero Bajo y en cientos de municipios de toda Castilla y León se han visto afectadas miles de hectáreas de cultivos como cereal, remolacha, girasol, maíz y viñedo, con daños muy serios que hasta el momento es muy difícil de cuantificar.

El fortísimo pedrisco localizado en puntos muy concretos va a originar serios problemas a la evolución de los cultivos, y por lo tanto va a traer consigo importantes pérdidas económicas.

Ante esta situación, UPA pide que los técnicos evalúen los daños con profesionalidad y que las administraciones sean especialmente sensibles ante la situación extrema que sufre el campo en la región.

Además UPA está informando a los agricultores de las zonas dañadas que no se precipiten a la hora de realizar las peritaciones, ya que en muchas cebadas, centenos y trigos no se aprecia el daño hasta que transcurran unos días y se produzca la lógica caída de los granos al suelo.

En este sentido nuestra organización solicitará de las administraciones competentes que de forma excepcional se tenga en cuenta la situación en la que se encuentran muchas parcelas de cereal, que con una sequía muy fuerte, tras estas tormentas definitivamente han perdido su cosecha.

UPA considera que tras la situación que llevábamos sufriendo los agricultores en las últimas semanas con nulas precipitaciones y altísimas temperaturas, ahora la virulencia de las tormentas de granizo que han descargado en varias zonas de región, han dado al traste con muchas parcelas de cereal, y otros cultivos en sus primeras fases de crecimiento.