Desde hace meses, las organizaciones profesionales agrarias españolas no hacen más que denunciar los continuos robos que están sufriendo en sus explotaciones, tanto de cosechas como de maquinaria. En otros países también está sucediendo lo mismo.

La organización agraria NFU-Escocia está denunciando el sinfín de robos de los que sus asociados están siendo objeto. Los robos van desde costosos tractores a pequeñas piezas de maquinaria como una batería o un cuadro eléctrico de una valla electrificada, así como animales, gasoil, fertilizantes y cualquier cosa de valor. La organización NFU ha recomendado a sus socios que traten de poner todos equipos, maquinarias, materias primas y animales al mejor recaudo posible y que denuncien a la policía la presencia de vehículos o personas sospechosas que anden alrededor de sus explotaciones.