Tras lo acordado anteayer en Madrid durante la Conferencia Sectorial, la Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL) se congratula de la decisión alcanzada por la que se abre a los ganaderos de ovino de leche la posibilidad de acogerse, de cara a la próxima campaña, a la línea de ayudas incluida dentro del Artículo 68 del Reglamento 73 / 2009 destinada a compensar las desventajas específicas ligadas a la viabilidad económica de este tipo de explotación y que hasta la fecha estaba reducida sólo a aquellos que tuviesen una orientación cárnica.

Esta Organización recuerda que este cambio normativo ha sido reclamado con insistencia por el sector ante la profunda crisis que, en su conjunto, el ovino y caprino de Castilla y León lleva soportando más de dos años como consecuencia, por un lado, de la desmedida subida de los principales factores de producción como los piensos y, por otro, de la actitud de la industria y la distribución que juegan a su antojo con el futuro de estos profesionales, reduciendo constantemente el precio que en origen pagan por sus producciones ya sea la carne o la leche. En este sentido, según los cálculos elaborados por UCCL, los 8.000 ganaderos de ovino de la región acumulan en el último año unas pérdidas que rondan los 76 millones de euros, teniendo en cuenta los 0,24 euros por litros que pierden cuando entregan a las industrias los 317 millones de litros que las 3.500.000 ovejas castellanoleonesas producen anualmente.

La Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL) reitera la reclamación del sector a la Consejería de Agricultura y Ganadería de a creación de una mesa de negociación del precio de la leche de ovino en la que esté presente, evidentemente, uno de los principales responsables de esta situación la industria, actuando la propia Administración como arbitro de la situación y garante de los posibles acuerdos que se alcancen.