La falta de lluvias, que desde hace semanas está afectando en algunas zonas de Argentina, ha motivado que la administración del país haya revisado a la baja las cifras de cosecha. Inicialmente se preveía que la producción de grano pudiera llegar a los 110 millones tn, lo que hubiera supuesto 6,4 millones tn más que la campaña anterior. Sin embargo, las nuevas cifras apuntan a que la cosecha no será tan buena como se esperaba y que incluso será menor que la del año anterior. Esta revisíón a la baja ha tenido un impacto en los precios internacionales de los cereales.

La administración argentina ha estimado que esta campaña la cosecha rondaría los 100 millones de toneladas, es decir, 10 millones menos que lo inicialmente previsto y unos 3,6 millones de tn menos que en el ciclo anterior. No obstante, el Ministerio argentino considera que esta cifra podría variar según la merma por la sequía que haya sufrido el maíz, ya que esto depende de la siembra de segunda y la cosecha. El Instituto argentino de Tecnología Agropecuaria ha anunciado la elevada probabilidad de lluvias en los próximos días, por lo que el panorama podría mejorar.

Por otro lado, el ministro argentino de agricultura, Norberto Yauhar, ha manifestado que hay que restar dramatismo a la situación asegurando que la actual falta de lluvias no es comparable con la gravedad de la sequía del 2008, como en algunos medios se había mencionado. En algunas zonas ha habido menos lluvias de lo habitual, mientras que en otras las precipitaciones han sido las habituales. Además, el ministro ha señalado que no se crearán fondos especiales para productores afectados por la sequía, sino que se actuará con los fondos ya presupuestados para la emergencia agropecuaria y se concederán ayudas caso por caso.

Estas declaraciones del ministro, que lleva escasas semanas en su cargo, han generado muchas críticas entre los representantes de los agricultores argentinos, por considerar que no valora la gravedad de la situación y porque está dando la espalda al sector al no querer ayudarlo. Las organizaciones agrarias han presentado varias propuestas de medidas de ayudas, como que se reduzcan las retenciones (derecho de exportación actualmente fijado en el 35%), o que parte de las retenciones recaudadas se destinen a compensar las pérdidas por sequía o que se eliminen las retenciones para los productores de menos de 10.000 tn.