Los ganaderos de porcino del Reino Unido quieren tomar la iniciativa en fomentar el bienestar de sus animales, sin esperar a que las organizaciones de defensa animal y la opinión pública les demanden nuevas mejoras. Productores, veterinarios y científicos están promoviendo la iniciativa Real Welfare (en castellano “Verdadero Bienestar”)

Hasta ahora, los porcicultores británicos se sentían por delante de sus homólogos continentales porque su administración ya aplicaba normas más estrictas en bienestar animal, como la prohibición total de jaulas de gestación (que lleva varios años aplicándose en el Reino Unido), sus camas de paja y su prohibición voluntaria de la castración. Sin embargo, estas diferencias se van acortando. En 2013, en la UE se aplicará la prohibición parcial de las jaulas de gestación y en 2018 la prohibición voluntaria de la castración.

Por este motivo, los ganaderos del Reino Unido han querido volver a estar por delante del resto de los países de la UE en relación con el bienestar y desde la sectorial de porcino del Reino Unid se está promoviendo esta iniciativa.

Los veterinarios que llevaran a cabo las auditorias de Real Welfare tendrían que puntuar a los cerdos en función de cojeras y daños, así como analizar los “indicadores iceberg” (muestran señales de posibles problemas), es decir, lesiones corporales y en el rabo.

Esta iniciativa ha sido presentada por la sectorial de porcino británica a la Comisión Europea, recibiendo muy buena acogida por parte de ésta.

Esta certificación permitiría que los ganaderos que cuidan sus cerdos en el interior de naves pudieran competir con los que los cuidan en el exterior (práctica muy implantada en el Reino Unido), demostrando que pueden producir cerdos con un elevado estándar de bienestar. De hecho, ya algunos productores de cerdos en el exterior ven en Real Welfare una amenaza al valor añadido de su tipo de producción.