Las empresas de maquinaria agraria necesitan modificar sus modelos de negocio para poder satisfacer la creciente demanda global de alimentos, de acuerdo con un informe de Rabobank. Ante las expectativas de que la demanda global de alimentos aumente en un 70% en 2050, el papel de los fabricantes de maquinaria y los vendedores de equipos tendría que cambiar y la maquinaria se tendría que convertir en una parte integral de la solución para incrementar la productividad.

Sin embargo, dada la diversidad que hay entre los agricultores no hay un solución de “talla única” ni un único modelo para la fabricación y venta de maquinaria. Por ejemplo, en Asia y África que tienen una pequeña estructura agraria, se encuentran en sus inicios para la adopción de maquinaria agraria moderna. Por el contrario, en la UE, EEUU y Australia, las explotaciones son grandes y están mecanizadas.

El creciente tamaño de las explotaciones, la disponibilidad de nueva tecnología y las oportunidades emergentes para combinar maquinaria y otros inputs resulta en la demanda de soluciones agrícolas integradas. Los fabricantes de maquinaria pueden, o bien, tomar un papel director en el desarrollo de soluciones agraria integradas o bien tomar un papel secundario, contribuyendo a las soluciones integradas propuestas por otros. En cualquier caso necesitarán colaborar unos con otros para tener masa crítica y poder financiar la I+D.