La respuesta a la pregunta del titular es no, no lo consiguieron. Las 82 vacas de la explotación Lhomme, en Pouilley-Français (departamento de Doubs, este de Francia), fueron finalmente sacrificadas en la tarde del 2 de diciembre, después de que uno de los animales diera positivo a dermatosis nodular contagiosa (DNC). Se trata de un rebaño vacunado, con más de 30 días desde la administración de la vacuna, convertido ahora en símbolo del debate sobre el sacrificio de vacas vacunadas por DNC en Francia.

En la mañana de ese mismo día, más de 500 ganaderos y ciudadanos se concentraron ante la granja para apoyar a la familia propietaria e intentar impedir la entrada de los equipos encargados del sacrificio. Según han informado la Confédération Paysanne (Confederación Campesina) y la Coordination Rurale (CR), ambas organizaciones habían presentado un recurso de urgencia contra la orden de sacrificio total, actualmente en examen por el tribunal de Besançon. El recurso se apoya en la “grave e inminente” vulneración de la libertad de ejercer la profesión de ganadero y en la oposición al sacrificio de vacas vacunadas por dermatosis nodular contagiosa.
Intervención policial y tensión en Pouilley-Français
La jornada estuvo marcada por una fuerte presencia policial. Las organizaciones agrarias denuncian que hasta 175 agentes fueron desplegados en la zona y que se hizo uso de gases lacrimógenos para dispersar a quienes apoyaban a la familia Lhomme. Relatan además que un agricultor fue obligado a descender de su tractor, dos ganaderos fueron arrestados y dos tractores quedaron incautados. También un gendarme resultó herido porque le tiraron piedras.
Para la Confédération Paysanne y la CR, esta intervención marca un precedente preocupante: es la primera vez, desde el inicio de la crisis de dermatosis nodular contagiosa, que se recurre a las fuerzas del orden para garantizar el sacrificio total de un rebaño. En el comunicado de prensa difundido por la Coordination Rurale, la organización subraya que los agricultores han ejercido su “derecho legítimo a defender su rebaño” y denuncia que se les trate como si fueran delincuentes, reclamando a la Prefectura que reduzca la presión sobre el terreno.
Un positivo en una vaca vacunada y una orden de sacrificio total
El caso se detectó el jueves 27 de noviembre, cuando se sospechó un posible foco de DNC en la explotación. La positividad se confirmó al día siguiente, según la Secretaria General de la Prefectura de Doubs. Ante un “riesgo de propagación considerado muy alto”, la Prefectura emitió una orden de infección y decretó el sacrificio total del rebaño.
La familia ganadera solicitó un segundo análisis sobre la vaca afectada, pero esta petición fue rechazada, y el 29 de noviembre se firmó el decreto prefectural que confirmaba la obligación de sacrificar las 82 vacas, pese a que el rebaño estaba vacunado contra la DNC desde hacía más de 30 días. Las organizaciones agrarias insisten en que se trata de animales vacunados con más de un mes de antelación y cuestionan que se recurra a un sacrificio total en estas condiciones, lo que refuerza la polémica en torno al sacrificio de vacas vacunadas por dermatosis nodular contagiosa en Francia.
Críticas de las organizaciones agrarias a la estrategia sanitaria
La Coordination Rurale califica de “inconcebible” que el Estado mantenga una política de sacrificios masivos sobre rebaños vacunados, señalando tanto las consecuencias para los ganaderos como el coste para las finanzas públicas. La Confédération Paysanne, por su parte, denuncia que la política sanitaria aplicada en este caso es “intolerable” y que debe detenerse de inmediato.
Las dos organizaciones reclaman una revisión profunda de la estrategia francesa frente a la dermatosis nodular contagiosa, con más peso de los criterios científicos y de la realidad de campo. Entre las peticiones se incluye también que se valoren las consecuencias de la vacunación generalizada en las zonas afectadas, se clarifiquen las repercusiones sobre la exportación y se estudie un eventual cambio de clasificación sanitaria de la DNC a nivel europeo, dado que se trata de una enfermedad con riesgo sanitario limitado y no transmisible a las personas, según argumentan las organizaciones.
Compensaciones económicas y dudas abiertas
Desde la Prefectura de Doubs, la Secretaria General ha anunciado que el Estado prepara anticipos de tesorería y compensaciones para tratar de paliar el impacto económico del sacrificio. Las propuestas del Gobierno francés contemplan indemnizaciones de 2.100€ por vaca y 1.100€ por animal menor de dos años. Para las organizaciones agrarias, sin embargo, las compensaciones financieras no resuelven el impacto moral y profesional que supone ver desaparecer un rebaño entero, mucho menos cuando se trata de animales vacunados.
En declaraciones a la prensa francesa, Bruno Vincent, director departamental de la DDETSPP (Dirección Departamental de Empleo, Trabajo, Solidaridad y Protección de las Poblaciones) de Doubs, recuerda que los animales fueron vacunados el 22 de octubre, 36 días antes de la aparición de los síntomas. Explica que la inmunidad suele ser efectiva a partir de los 21 días, pero que, si el animal todavía no ha desarrollado una protección completa y es picado por un vector como tábanos o chinches, puede enfermar igualmente. El periodo de incubación se sitúa generalmente entre 7 y 10 días, aunque puede extenderse hasta 28 o incluso 35 días, según el responsable francés.




Política de comentarios:
Tenemos tolerancia cero con el spam y con los comportamientos inapropiados. Agrodigital se reserva el derecho de eliminar sin previo aviso aquellos comentarios que no cumplan las normas que rigen esta sección.