La Federación de Cooperativas Agrarias de Cataluña (FCAC) alerta de que los efectos de la sequía dejarán huella en la vendimia de este año, que se reduciría en torno al 48% en relación con un año normal. Según datos de las cooperativas, la cosecha se situaría en unos 225 millones kg de uva frente a 430 millones kg de una campaña media.
Las zonas más afectadas son el Alt y el Baix Penedès, el Alt Camp y el Tarragonès. En algunos casos, las pérdidas podrían llegar al 80% e incluso llegaría a peligrar la viabilidad de la planta. En Terra Alta y Empordà, aunque no tan importante, también se prevé un descenso en la producción.
Joan Josep Raventós, responsable de vino y cava de la FCAC, argumenta que “este es el segundo año consecutivo de sequía y las cooperativas ven con mucha preocupación que la falta de producción del viñedo impida el abastecimiento de los clientes habituales y provoque una pérdida de cuota en los mercados en los que se trabaja desde hace años. Todo ello podría dificultar el mantenimiento del empleo en el sector”.
La baja cosecha y el mantenimiento de los gastos fijos provocan un notable incremento de los costes de elaboración. Para hacerle frente, la FCAC reclama a las Administraciones que se aceleren las ayudas comprometidas para los viticultores y que se prevean ayudas similares por las cooperativas que, en determinados casos, podrían ver peligrar la viabilidad de la empresa.
En Cataluña existen 59 bodegas cooperativas que producen el 48% del vino catalán.
Política de comentarios:
Tenemos tolerancia cero con el spam y con los comportamientos inapropiados. Agrodigital se reserva el derecho de eliminar sin previo aviso aquellos comentarios que no cumplan las normas que rigen esta sección.