El gobierno alemán a aprobó a finales de enero pasado un proyecto de ley para acabar con el sacrificio de los pollitos machos de 1 día, práctica conocida como sexaje de pollo. Esta es una iniciativa pionera en todo el mundo, aunque ya hay países como Francia que también quieren legislar en este sentido.

De acuerdo con este proyecto de ley, a partir de 2022 no se podrán sacrificar pollitos machos de 1 día. Para acabar con esta práctica, se está trabajando en varias alternativas, pero la más prometedora es determinar el sexo del pollo en el huevo, para no incubar huevos que de pollos macho. Se trataría de sustituir el sexaje de pollos por el sexaje de embriones.

El gobierno alemán ha invertido varios millones de euros en financiar proyectos de investigación para determinar el sexo del pollito antes de que el huevo eclosione. Antes de final de 2021, habrá métodos en el mercado que puedan determinar el sexo en el huevo entre el día 9 y el 14 de incubación (el período total de incubación es de 21 días).

Se están llevando a cabo más investigaciones para poder determinar el sexo en el huevo en un momento aún más temprano, ya que la propuesta de ley establece que a partir del 1 de enero de 2024 no se pueda destruir embriones después del sexto día de incubación.

El procedimiento que estará listo para el mercado, surgió de una investigación financiada por el Ministerio de agricultura alemán. Se denomina “procedimiento endocrinológico”. Los huevos se incuban durante unos nueve días. Luego se extrae un poco de líquido de cada huevo sin tocar el embrión, lo que permite determinar el sexo en poco tiempo mediante un método de detección biotecnológico.

Hay también otras alternativas para eliminar el sacrificio de pollitos macho de 1 día, como son los pollos de doble fin y la cría de machos de líneas de puesta.

La alternativa de pollitos de doble fin proceden de gallinas que se utilizan para producir huevos y para engordar a los machos. El problema de esta alternativa es que las gallinas de estas razas ponen menos huevos y a veces más pequeños y los pollitos engordan más lentamente y con menos pechuga que los broilers.

La opción de criar polluelos machos a partir de líneas de puesta genera carne que normalmente se procesa y que va principalmente dirigida al mercado ecológico.