En el norte de Europa, la campaña de siembra de cereales de invierno se ha completado con éxito, con buenas condiciones para el establecimiento de los cultivos, según recoge el Boletín del estado de las cosechas de la Comisión Europea (Boletín MARS).

En Benelux, Francia, Alemania, Polonia, Eslovenia y Croacia, las lluvias frecuentes, caídas en octubre, frenaron el progreso de la siembra en gran parte de estos países. No obstante, las condiciones más secas de noviembre ayudaron a recuperar el tiempo perdido.

Por el contrario, en Chequia y Eslovaquia, las lluvias abundantes retrasaron aún más la siembra de los cultivos de invierno y proporcionaron malas condiciones para el establecimiento de los cultivos ya sembrados.

Hungría, Rumanía y Bulgaria también experimentaron retrasos importantes debido a las abundantes lluvias a principios de octubre, pero un tiempo más seco de lo habitual a principios de noviembre y la previsión de que se mantendrá así en los próximos días, permite esperar que se puedan completar las siembras.

En el sur de Europa, la siembra ha progresado bien.

Colza

La superficie sembrada de colza en Europa podría ser menor que la del año pasado y que la media de los últimos 5 años. El norte de Europa y Polonia, se beneficiaron de las buenas condiciones para la siembra y la emergencia del cultivo, pero las fuertes lluvias de la primera quincena de octubre dañaron parte de los campos, debido al encharcamiento.

En Francia, Alemania, Rumanía, Bulgaria, así como en Ucrania y el Reino Unido, tuvieron, al principio, un tiempo muy seco que dificultó las siembras. Posteriormente, Alemania, Francia y Reino Unido se beneficiaron de lluvias. En Alemania fueron adecuadas, por lo que la superficie sembrada se espera que sea mayor que el año pasado. Por el contrario, en Francia y Reino Unido, las lluvias fueron excesivas, lo que retrasó las siembras, perdiéndose la ventana de siembra. En estos dos países, la superficie sembrada es menor que la del año pasado y que la de la media de los últimos 5 años. Además de por los motivos meteorológicos, también los agricultores están poco inclinados a su siembra por los bajos rendimientos y dificultades del cultivo.