Azucarera ha finalizado la campaña remolachera 2017/2018 en la zona norte alcanzando un aforo total de 1.697.164 toneladas de remolacha recibida, lo que supone un 5% de incremento respecto a la campaña anterior. La campaña, que se inició el 3 de octubre, ha obtenido una riqueza media de 17,48%.

La fábrica de La Bañeza ha recibido, tras sus dos periodos de recepción, un total de 544.841 toneladas de remolacha con una riqueza media del 16,96%. Por su parte, la fábrica de Toro ha alcanzado las 761.415 toneladas de raíz líquida con un 18,06% de polarización. En la Azucarera de Miranda de Ebro se han entregado 390.908 toneladas de remolacha con una riqueza del 17,09%.

Según Salomé Santos, Directora Agrícola de Azucarera, “en la campaña 2017/2018 todos hemos hecho un esfuerzo importante por minimizar el impacto de las adversidades climatológicas. Los resultados de la campaña son fruto de la colaboración y coordinación que existe entre los agricultores, nuestro equipo agrícola, el personal de fábrica de Azucarera y las organizaciones agrarias”.

Previsiones campaña de siembras 2018/2019

Actualmente se están finalizando las labores de siembra en la zona norte, especialmente en algunas parcelas que han requerido de un mayor tiempo para lograr la pérdida de humedad necesaria para conseguir una correcta preparación del terreno. En todo caso, algunos agricultores no podrán sembrar este año debido a las precipitaciones constantes de estas últimas semanas, por lo que la superficie prevista en el Norte será algo menor que la de la campaña pasada.

Según Salomé Santos, “aunque nos habría gustado crecer en superficie y la climatología lo ha impedido, confiamos en que la superficie sembrada evolucione en condiciones óptimas ya que, dados los altos niveles de agua embalsada, habrá una buena campaña de riegos, a diferencia de la pasada campaña. Además, las temperaturas hasta la fecha están siendo buenas para el desarrollo del cultivo. Los equipos técnicos de Azucarera continuarán su colaboración con los agricultores para realizar un seguimiento efectivo del cultivo con el fin de obtener los rendimientos óptimos en estas condiciones”.