El Gobierno argentino quiere obligar a las grandes cadenas de supermercados a tener góndolas especiales con productos regionales y de pequeñas y medianas empresas. Todavía no está definido sobre qué supermercados se aplicará esta obligación, pero se baraja que se aplique sobre los que tienen más de 800 a 1.000 metros cuadrados.
Las góndolas pyme estarán focalizadas en productos de las economías regionales y contarán con una identificación particular. La idea es que funcionen como las góndolas que tienen algunas cadenas de supermercados para reunir su oferta de artículos importados.

La distribución no parece estar muy contenta con esta propuesta porque considera que ya se abastece con productos regionales y de PYMES y alegan que no es de recibo que imponga como obligación y además, muchas veces las PYMES no tienen la capacidad de producción para atender las necesidades de una gran cadena.
El gobierno argentino también quier instaurar la figura del Defensor Pyme, que funcionaría como una especie de Defensa del Consumidor, pero orientada a proteger los derechos de las pequeñas empresas frente a sus proveedores, clientes y competidores. Será implementado a través de una página web en la que las empresas podrán realizar sus denuncias. En base a estas denuncias el Defensor podrá convocar a una conciliación entre las partes o intervenir directamente de oficio.