Las siete principales cadenas de distribución de Francia, entre las que se encontraba Leclerc, Auchan y Casino, firmaron ayer con el Presidente de la República francesa, Nicolás Sarkozy un acuerdo de moderación de márgenes para el sector de las frutas y hortalizas. Este acuerdo consiste en que cuando se produzca una situación de crisis coyuntural, el distribuidor se compromete a mantener la tasa de margen bruto que ha practicado, como media, en el curso de las tres últimas campañas. Esto quiere decir, que la distribución tiene que, o bien, bajar el precio de venta al consumidor, o bien, aumentar el precio de compra a los productores.

Se consideraría una situación de crisis cuando el precio de venta por el productor sea significativamente inferior a la media del precio de venta en los últimos 5 años, quitando el peor y el mejor año.

Sarkozy quiere reglamentar este tipo de acuerdos, introduciendo una modificación en el proyecto de ley de modernización de la agricultura que tiene que ser debatido en el Senado. También se quiere introducir una tasa de penalización para los distribuidores que no firmen los acuerdos. Esta tasa de aplicaría solo a los distribuidores que tienen un cifra de negocios en el sector de frutas y hortalizas superior a 100 millones de euros.