Una nueva publicación del estudio internacional INTERHEART sobre salud cardiovascular basada en nuevos trabajos científicos, corrobora los efectos beneficiosos del consumo de frutas y hortalizas, así como los efectos nocivos de una dieta “occidental” con alto consumo de carnes, alimentos fritos y aperitivos salados.

El estudio identifica tres patrones de dieta;

Occidental; con alto consumo en carnes, huevos, fritos
Prudente; con alto consumo en frutas y hortalizas
Oriental; con alto consumo en alimentos como tofu y soja

Aunque otros estudios previos llegan a la misma oclusión, este está realizado sobre una base más amplia, basada en 16.000 participantes en 52 países.

Las personas que siguen una dieta prudente tienen por término medio un 30% menos riesgo de enfermedad coronaria que las que consumen pocas frutas y hortalizas, mientras que las que siguen una dieta “occidental” tienen un 35% más riesgo que las que consumen poca cantidad de carne y alimentos fritos. El patrón de alimentación oriental no muestra relación con el riesgo de enfermedad coronaria.