El secretario general de ASAJA MÁLAGA, Carlos Blázquez, se reunió el viernes con la directora general de Producción Agraria de la Consejería de Agricultura y Pesca, Judith Anda Ugarte, para exigir el pago inmediato de las ayudas por lengua azul. Como se recordará, ASAJA ha denunciado el impago en reiteradas ocasiones. Son más de 2,5 millones de euros, aproximadamente, lo que la Administración debe a los ganaderos de la provincia. La entidad se comprometió a abonar dicha cantidad a finales de 2007, tras la muerte de 26.000 ovejas. Diez meses después, el compromiso sigue sin materializarse por completo.

El representante de la asociación agraria, harto de promesas incumplidas, exigirá a Judith Anda, el desembolso inmediato de las ayudas. Hay más de mil ganaderos afectados, en una situación de crisis insostenible: el precio de los piensos se ha incrementado de manera alarmante, mientras que la carne se devalúa en el mercado. A estas circunstancias tan adversas hay que añadir que los ganaderos, al no haber obtenido las ayudas, no pueden reponer los animales muertos, con lo cual, pierden también el derecho de prima. “La situación creada por la Administración no puede ser más injusta”, apostilla Carlos Blázquez.

ASAJA MÁLAGA ha mantenido diversas conversaciones con representantes de la Delegación de Agricultura, que achacan a obstáculos burocráticos la demora de los pagos.

Además, ASAJA quiere hacer público también el malestar que sienten los ganaderos la provincia por la dejadez de la Administración en la entrega de los resultados de los análisis del ganado. El último chequeo, relata un asociado, se realizó en su explotación a finales de diciembre. El resultado del chequeo, que habitualmente tarda unos 20 días en conocerse, aún no ha llagado. Diez meses después, el ganadero se encuentra atado al no poder realizar, ni siquiera, un contraanálisis, ya que tan sólo se llevaron una muestra. La situación, afirman los ganaderos afectados, es desesperante