Anualmente se analizan por EEB en la UE-15, 10 millones de animales vacunos. El número de casos detectados ha descendido de 2.164 en 2001 a 149 en 2007. Si en lugar de realizar el test de EEB a los animales que se sacrifican con 30 o más meses, se hicieran a los de 36 o 48 meses, menos de un caso de EEB se dejaría de detectar según el Panel de Riesgos Biológicos de la Autoridad Europea de Seguridad de los Alimentos (EFSA). Si la edad para realizar el test se elevara a 60, 72 o 84 meses, menos de 2, 4 y 6 casos de EEB, respectivamente, se dejarían de detectar en la UE-15.

En cuanto a la edad para realizar los test en los animales de riesgo, el Panel opina que si se elevara de los 24 meses actuales a 30, 36 o 48 meses, se dejaría de detectar menos de un caso al año. Si el umbral se elevara a 60 meses de edad, los casos no detectados sería menos de 3.

El Panel ha opinado que el límite de edad de 48 meses en vacuno de riesgo permitiría la detección de la mayoría de casos si la EBB re-emergiera. No obstante, el Panel considera que el límite de edad de 24 meses en los animales de riesgo proporcionaría un aumento de la sensibilidad en la detección de posible re-emergencia de la EEB y debería permitir una eficiente detección en el caso de que emergiera un nuevo tipo de EET en el vacuno.

En el caso de que se dejaran de analizar en la UE-15 los animales nacidos después del 31/12/2003, es decir, 3 años después de la prohibición total de las harinas, el Panel ha estimado que menos de 6 casos dejarían de detectarse.

El Panel también considera que es incierto si el actual sistema de vigilancia de la EEB proporciona datos fiables sobre la prevalencia de la EEB atípica, dado que hay incertidumbres sobre la sensibilidad y especificidad de los actuales test en relación a esta forma de EEB. Dado que hasta ahora no se han detectado casos de EEB atípicos en animales menores de 96 meses, elevar la actual edad de análisis de 24 meses a 30 meses o incluso a 60 o 84 meses no tendría mayor impacto en la detección de la EEB atípica.