Las superficies sembradas de variedades de ciclo corto y piel más blanda (carrera, jaerla, agata…) son las más afectadas por esta enfermedad que se ha extendido de manera muy violenta aprovechando las especiales condiciones climatológicas de los últimos meses.

Ante la tremenda preocupación que se está suscitando entre los agricultores ante la extensión de esta enfermedad, la Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL) aconseja a todos los cultivadores de patata de la región que acorten los periodos entre tratamientos contra el mildiu al objeto de que el hongo no pase de la planta al tubérculo. En este sentido, desde esta Organización se considera vital que si el periodo entre tratamientos de fungicidas ya sean sistémicos, de contacto o preventivos se viene cifrando entre los 18 – 20 días ahora se reduzcan a los 10 – 12.

Según ha podido conocer esta Organización este hongo ha aprovechado el clima ideal (humedad relativa elevado y temperaturas nocturnas suaves y constantes durante varios días) que se ha dado en las últimas semanas para su desarrollo y extensión por amplias zonas de las principales comarcas patateras de esta región como el sur de Medina del Campo, Segovia, Salamanca o Burgos, afectando especialmente a variedades de ciclo más corto y que cuentan con una piel más blanda como es el caso de la carrera, jaerla, agata…

Este hongo, que comienza afectando la hoja para extenderse posteriormente al tallo y los tubérculos, está provocando daños que superan en muchas parcelas el 25 % de una producción media que se puede establecer entre los 45.000 y los 50.000 kilogramos por hectárea. Circunstancia esta especialmente preocupante teniendo en cuenta, además, los costes de producción que tiene una hectárea de este cultivo que supera los 4.000 euros y la situación de crisis que vive, en general, el sector agrario de Castilla y León.

Valladolid, jueves, 03 de julio de 2008