Ciudad Real, 12 de junio de 2006.- ASAJA considera lamentable que algunos que se hacen llamar representantes de organizaciones agrarias apoyen los intereses de los llamados ecologistas, en contra del regadío de Castilla-La Mancha.

Y es que hoy más que nunca debemos pensar en evitar a toda costa una hipoteca para nuestra provincia y nuestra región; en trabajar, de cara al futuro, en la recarga de los acuíferos sobreexplotados; en alcanzar la definitiva regularización de los pozos alegales; en la reordenación de los derechos de riego; y en garantizar el agua para aquellas explotaciones agrarias que lo necesitan.

Se hace indispensable que pensemos en el futuro. Y para ello es necesario que los representantes de la Administración y los representantes de los agricultores de Castilla-La Mancha concentren sus esfuerzos en solucionar esta grave situación, en lugar de seguir permitiendo las denuncias y las sanciones contra el colectivo agrario.

En este sentido, los firmantes de este Plan Especial del Alto Guadiana deberán responder ante los agricultores sancionados, puesto que el acuerdo al que han llegado no elimina las denuncias impuestas a los afectados y, por lo tanto, no resuelve el problema de muchos profesionales agrícolas de la región, legitimando, de esta manera, el modo de actuar de la CHG.

ASAJA está dispuesta a alcanzar acuerdos, ha trabajar por el futuro de nuestra región, junto a la Administración y las Comunidades de Regantes, tal y como viene haciendo, para la elaboración de un Plan Especial del agua que se pueda cumplir, que sea racional y que resuelva los problemas de muchos agricultores a los que se está multando y sancionando por tener pozos irregulares que necesitan para continuar con su actividad.

Desde esta Organización Agraria hacemos un llamamiento para evitar que los problemas hídricos se conviertan en un conflicto social, y manifestamos que nuestro objetivo es conseguir que todos los que tienen algo que decir al respecto del agua en Castilla-La Mancha, entiendan que, actualmente, lo primero son los agricultores y los regantes, y que así lo defiendan.