ASAJA de Castilla y León exige a Ebro Puleva que se comprometa a reabrir una azucarera cuando la remolacha pendiente de extraer en la región, cerca de 70.000 toneladas, se pueda arrancar, algo ahora imposible por el estado de encharcamiento de las parcelas.

En concreto, la situación afecta a cerca de 260 agricultores –70 de la provincia de Palencia y 190 más de la de Salamanca– que no pueden recolectar la raíz por las precipitaciones registradas en las últimas semanas, y que habían retrasado la cosecha más tiempo de lo habitual en buena parte auspiciados por una campaña de entrega planificada erróneamente por la industria. ASAJA entiende que, como ha ocurrido en ocasiones anteriores, es totalmente justificable un paro temporal de la actividad fabril por inclemencias meteorológicas, siempre teniendo presente que en unas semanas, superadas las dificultades, la molturación prosiga hasta recibirse toda la remolacha pendiente.

En este sentido, ASAJA se ha dirigido al presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera; a la ministra de Agricultura, Elena Espinosa, y también a las cajas de ahorro que están presentes en el Consejo de Dirección de Ebro Puleva para que se impliquen en este problema y procuren dar una solución a los afectados, ya que de lo contrario muchos de ellos se enfrentarían a una situación ruinosa. “Es necesario que las administraciones y las cajas obliguen a Ebro Puleva a mantener su compromiso con los remolacheros, recibiendo la totalidad de las toneladas pendientes”, subraya ASAJA.

Además, ASAJA pide al resto de las organizaciones agrarias que no titubeen en la defensa de los remolacheros afectados y que planten cara a la industria en la próxima reunión de la Mesa Zonal, que se celebrará el próximo martes en Valladolid. Por último, ASAJA apunta que durante estos días no se convocarán protestas para no interferir en el fruto de las negociaciones abiertas, pero si la industria no acepta esta reapertura “no dudaremos en responder con movilizaciones contundentes, al menos por parte de esta organización”.