13 de diciembre de 2005. Después de la última muerte registrada en el campo salmantino a consecuencia de una fuerte descarga eléctrica sufrida por un agricultor de Nuevo Amatos mientras cosechaba, ASAJA salamanca ha remitido un escrito a la delegación de Iberdrola en la provincia instándole a que, en colaboración con la Junta, proceda a habilitar la inversión necesaria para elevar el cableado de alta tensión que atraviesa las explotaciones agrícolas.

Este tipo de siniestro laboral, desafortunadamente, es un riesgo habitual que ASAJA ha puesto de manifiesto en innumerables ocasiones ya que, especialmente en las explotaciones de regadío, la altura de los postes, en torno a los 6 metros o incluso menos al estar destensados los cables, resulta insuficiente. Dicha altura constituye además un grave peligro para el agricultor ya que mientras trabaja con una cosechadora que puede alcanzar los 4 metros de altura desplegada, la fuerza de atracción eléctrica del tendido podría provocar la muerte y electrocución inmediata del agricultor, especialmente si la tierra está húmeda.

Con el propósito de acabar con este tipo de siniestros, ASAJA salamanca ha solicitado a la empresa eléctrica la ejecución inmediata de las obras necesarias para elevar, más allá de los siete metros, el tendido que atraviesa las explotaciones de regadío en la provincia.