Casi una treintena de personas del suroeste de Francia están padeciendo trastornos gastrointestinales por una contaminación por E.coli O157:H7. La causa son unos lotes de hamburguesas congeladas elaboradas con carne de vacuno que se llevan vendiendo desde primeros de octubre. Se comercializan bajo la marca Chantegril. Los lotes concretos son L206, L231 y L234.

El fabricante de la carne es la empresa Soviba y la contaminación se produjo en su planta de producción en Lion d´Angers, en el norte de Francia. Los lotes contaminados se han vendido en la cadena de supermercados Leclerc, que es una de la más importante de Francia. Además, también se ha distribuido carne contaminada a otros países de la UE, como España y Portugal.