Córdoba, a jueves, 07 de octubre de 2004.- Ante los insistentes rumores y filtraciones de que el Ministerio de Agricultura está negociando sobre la base de un desacoplamiento lejos del total, Asaja Andalucía manifiesta su preocupación y enorme malestar por esta información, que desoye las propuestas mayoritarias del sector, y se posiciona contra el acuerdo de todas las Organizaciones Agrarias y Cooperativas de Andalucía y de todos los Grupos Políticos del Parlamento Andaluz.

La aplicación en España de la nueva OCM del aceite de oliva y de la aceituna de mesa tiene que tener presente las directrices marcadas por la reforma intermedia de la Política Agraria Común de estabilidad y neutralidad en las ayudas recibidas hasta el momento, impidiendo el trasvase de rentas, así como la descohesión social, económica y territorial entre agricultores, municipios, y los diversos territorios. Hay que destacar que Andalucía ha sufrido ya una importante pérdida económica con esta nueva OCM, valorada en unos 35 millones de €, al introducir la campaña 1999/2000 como campaña de referencia para el cálculo de los importes de referencia. A esto se une que el Reglamento del Consejo donde se define la fórmula de cálculo de la ayuda desacoplada , para la campaña 2002 se toma la ayuda anticipada, que suele ser un 10% inferior a la definitiva, lo que significa una reducción de ingresos adicionales de 13,5 millones de € para nuestra Comunidad Autónoma.

Por todo ello, todas las Organizaciones Agrarias y Cooperativas de Andalucía, y posteriormente todos los Grupos Políticos con representación en el Parlamento Andaluz hemos manifestado al Gobierno de la Nación que para la aplicación de la reglamentación de este sector se tengan presente los siguientes criterios:

1.- El sistema de ayuda que se determine debe garantizar que cada olivarero reciba al menos el mismo importe que el que haya percibido como media del período de referencia, preservando así el nivel de ingresos de cada Comunidad Autónoma, cumpliendo de esta forma el principio de estabilidad y neutralidad de la reforma intermedia de la PAC, evitando los flujos financieros entre los territorios.

2.- Debe de haber un compromiso firme de la Administración Central y Autonómicas de apoyo al olivar de baja producción, altos costes, aceituna de mesa y al olivar con derecho a ayuda sin cupo histórico. Para ello, se deberán destinar los remanentes presupuestarios surgidos en la reforma, así como los fondos de desarrollo rural (programa de ayudas agroambientales) aprovechando la mayor dotación presupuestaria, tanto por el mayor desarrollo de éstos como por la incorporación presupuestaria para estos fines de los fondos recaudados por la modulación.

3.- Al objeto de continuar garantizando la transparencia del mercado y la seguridad alimentaria, evitando mercados paralelos en circuitos no controlados ni fiscal ni sanitariamente, deberán establecerse los mecanismos que sean necesarios para poder controlar, tanto las cantidades producidas como las comercializadas a lo largo de toda la cadena hasta el consumidor final.

Por todo ello, ante los insistentes rumores y filtraciones de que el Ministerio de Agricultura está negociando sobre la base de un desacoplamiento lejos del total, Asaja manifiesta su preocupación y enorme malestar por esta información, que desoye las propuestas mayoritarias del sector, y se posiciona contra el acuerdo de todas las Organizaciones Agrarias y Cooperativas de Andalucía y de todos los Grupos Políticos del Parlamento Andaluz, y solicitamos al MAPA que modifique estas posiciones y cumplan con las peticiones del los representantes del sector y de los olivareros andaluces.