El
Observatorio del Mercado Lácteo de la UE ha investigado el papel de las
cooperativas lácteas a la hora de reducir la volatilidad del precio de la leche
que recibe el ganadero y el nivel de éste. El grado de volatilidad del precio de
la leche en cada Estado miembro se ha medido mirando el intervalo de precios al
productor en la última década, es decir de enero de 2007 a febrero de 1026.

Si se observa el
gráfico adjunto, se observa que en algunos países como Holanda e Irlanda, con un
elevado grado de implantación de cooperativas (entre un 85-95% de la leche es
recogida por las cooperativas), efectivamente hay una menor volatilidad en el
precio de la leche y éste se ha mantenido en una media cercana a 24 €/100 kg a
lo largo de la década estudiada.

Por el
contrario, otros países como Suecia y Dinamarca, donde las cooperativas lácteas
también tienen una importancia similar (entre 85-95% de la leche en
cooperativas) ,  tienen una mayor volatilidad de los precios, como demuestra que
el precio medio en el intervalo analizado ha sido de entre 18 a 19 €/100 kg.
Otros países, con menos implantación cooperativa como Alemania y Bélgica, con un
70% de la leche producida en cooperativas, han tenido menos volatilidad que
Suecia y Dinamarca, con un precio entre 20 y 22 €/100 kg.

Destacar que en
Dinamarca, donde prácticamente toda la leche está en manos cooperativa, el
precio de la leche ha tenido una volatilidad similar a la de Reino Unido (con
solo un 30% de la leche en cooperativas), Francia (50%), República Checa (65%) y
Polonia (75%).

Estos resultados
muestran que una elevada implantación de las cooperativas no necesariamente
evita el impacto de los precios mundiales. La volatilidad de los precios está
influenciada por otra serie de factores como si se realiza transformación de la
leche y en qué productos se transforma, así como la proporción que se exporta
fuera de la UE.