Sevilla, 18 de febrero de 2008.- UPA-Andalucía y el resto de organizaciones agrarias han acordado hoy poner en marcha el Plan de Apoyo al Sector Ganadero que permita paliar la crisis por la que atraviesan estas explotaciones, que están sufriendo fuertes pérdidas ante el incremento del coste de los piensos y las dificultades para trasladar al mercado esta subida. El Plan Andaluz de Recuperación de la Capacidad Productiva del Ovino-Caprino fomentará la recuperación de la cabaña y paliará la falta de rentabilidad de estas explotaciones, de manera especial aquellas que han padecido con mayor virulencia la elevada mortandad y los daños provocados por la lengua azul. Este plan ofrece a los ganaderos de ovino-caprino la posibilidad de acogerse a ayudas a la reposición y a préstamos preferenciales con los intereses bonificados en un 100%. El resto de sectores ganaderos (vacuno de carne, sector porcino y sector cunícola) cuenta también con un Plan de Apoyo basado en créditos bonificados a bajo interés.

Queda aún pendiente de desarrollar el Plan de Reestructuración del Sector del Ovino-Caprino, para fomentar la reestructuración de las explotaciones y hacerlas viables en la nueva coyuntura.

El acuerdo se completa con una campaña de promoción del consumo de la carne de ovino y con medidas de apoyo a las cooperativas que, a consecuencia de la crisis ganadera, hayan sufrido una disminución de su volumen de comercialización.

La Consejería de Agricultura se ha comprometido también a realizar propuestas ante el Ministerio de Agricultura y ante el Ministerio de Economía y Hacienda que permitan mejorar la fiscalidad de la ganadería afectada por la grave crisis vivida en 2007, una adaptación fundamental, puesto que el tratamiento fiscal de este sector debe estar acorde con su realidad productiva.

Por último, en el marco de este gran acuerdo sectorial, UPA-Andalucía, ASAJA-Andalucía y FAECA han presentado un documento por el que solicitan al consejero andaluz de Agricultura, Isaías Pérez-Saldaña, su compromiso y apoyo para conseguir de las autoridades europeas y españolas la modificación de las normas para lograr que se desacoplen las ayudas de todos los sectores ganaderos a fin de alcanzar los objetivos marcados en la última reforma de la PAC permitiendo de este modo la orientación de las producciones a las demandas del mercado.