Un juez de la Corte Federal de Canadá ha concedido una suspensión temporal de la orden de sacrificio de una bandada de avestruces en Columbia Británica, tras la detección de gripe aviar en la explotación. La decisión pospone la fecha límite inicial del 1 de febrero, establecida por la Agencia Canadiense de Inspección de Alimentos (CFIA), hasta que los tribunales revisen la legalidad de la medida.
Según el fallo del juez la granja podría sufrir un daño irreparable si el sacrificio se llevase a cabo antes de que se revisara el caso. Además, el tribunal ha considerado que existen preguntas razonables sobre la necesidad del sacrificio, lo que será objeto de futuras deliberaciones judiciales.
Un movimiento de apoyo y batalla legal
La granja afectada, Universal Ostrich, ha sido durante las últimas semanas, el epicentro de un movimiento de apoyo creciente, donde muchos consideran la orden de sacrificio como una extralimitación gubernamental que no ha tenido en cuenta las particularidades de la granja.
Los propietarios han criado a muchos de estos avestruces durante décadas y aseguran que, aunque 69 aves han muerto por gripe aviar, esta cifra representa solo una pequeña fracción de los aproximadamente 400 avestruces de la granja. Además, afirman que todas las aves fallecidas eran jóvenes y que los ejemplares adultos se encuentran en buen estado de salud, sin registrar nuevas muertes desde el 14 de enero.
Desde la granja han argumentado que las aves podrían haber alcanzado inmunidad de rebaño, ya que no se han reportado nuevas muertes en semanas. Sin embargo según la prensa local parece haber poca evidencia científica que respalde la idea de que los avestruces puedan desarrollar inmunidad a la gripe aviar.
Los propietarios también han defendido que Universal Ostrich no comercializa carne de avestruz, lo que reduce el riesgo de propagación del virus. En su lugar, la granja se ha centrado en la investigación científica, asegurando que mantiene una colaboración con la Universidad de la Prefectura de Kioto (Japón) para estudiar la resistencia de estas aves a enfermedades. Sin embargo parece ser que la universidad no ha querido hacer declaraciones al respecto.
La postura de la CFIA y los riesgos sanitarios
A pesar de la suspensión temporal del sacrificio, la CFIA insiste en que la eliminación de las aves sigue siendo la mejor estrategia para evitar la propagación de la influenza aviar altamente patógena (IAAP, H5N1), detectada en la granja en diciembre de 2024.
Desde 2022, más de 14 millones de aves domésticas en Canadá han sido sacrificadas o han muerto debido a la gripe aviar, incluyendo 9 millones en Columbia Británica. La CFIA sostiene que esta enfermedad puede propagarse con facilidad, afectando a aves domésticas y silvestres, y transmitirse a otras especies, incluidos los humanos.
El abogado de la CFIA defendió en la audiencia judicial que la política de sacrificio es necesaria, incluso si las aves parecen saludables, porque el virus podría mutar y representar un riesgo para la salud pública y animal.
El debate sobre el sacrificio
El abogado de Universal Ostrich ha cuestionado la decisión de la CFIA, argumentando que la granja debería recibir un tratamiento distinto al de explotaciones avícolas comerciales. Asegura que la CFIA tiene otras opciones, como la cuarentena y el monitoreo de las aves, antes de ordenar su eliminación.
Por otro lado un profesor de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de Guelph se ha posicionado en la situación señalando que el sacrificio de aves infectadas es una práctica común para contener la gripe aviar, pero que en este caso su efectividad podría ser limitada, ya que el virus ya está ampliamente distribuido en el país.
El fallo judicial ha supuesto un respiro temporal para la granja, pero el destino de los avestruces dependerá del resultado del próximo proceso judicial.
Qué repugnancia y qué pena da oír estas noticias. Ojalá que este juez tenga solo un poco de cabeza y le quite la razón a esa panda de asesinos de seres vivos inocentes.