La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos UPA-Uce Extremadura ha recordado hoy en el X Salón del Vino y la Aceituna, que se está celebrando en Almendralejo, la situación complicada por la que está atravesando el sector del vino y que viene provocada, en parte, por la nueva Organización Común de Mercado (OCM) de este sector y el retraso en su aplicación. Por ello, UPA-Uce reclama al Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM) más celeridad y mayor transparencia e interlocución a la hora de gestionar la aplicación de esta OCM en España, para lo que debe tener en cuenta a los agentes del sector.
En un repaso a la situación de la viticultura en Extremadura, el secretario general de UPA-Uce, Ignacio Huertas, y la responsable del sector del vino de la Organización, Catalina García, han lamentado que la aprobación del Real Decreto para la aplicación de las medidas del programa de apoyo al sector vitivinícola español se haya producido con un gran retraso, ya que la OCM del sector vitivinícola entró en vigor el 1 de agosto de 2008 y este decreto se aprobó el pasado 27 de febrero.
Este retraso ha contribuido a generar una gran incertidumbre en el sector y una peor situación en el mercado. Los precios han sido a la baja, desde la venta de la uva, que donde cayeron entre un 35 y 30%, hasta la venta de vino, donde se está dando una paralización del mercado que no se puede explicar por un exceso de producción ya que no existe sobreproducción en España (se ha generado sólo dos millones de hectolitros más que hace un año).
Ante esta situación, UPA-Uce está estudiando la posibilidad de establecer una destilación de crisis como mecanismo de regulación de mercado. No es una medida que la Organización esté pidiendo en estos momentos, pero sí la está estudiando como posible solución para esta campaña.
En cuanto a la aplicación del Real Decreto aprobado, que regula las cinco medidas (promoción en países terceros, reestructuración y reconversión de viñedos, eliminación de subproductos, destilación de alcohol para uso de boca y destilación de crisis) adoptadas por el MARM dentro del conjunto de acciones que permitía el Reglamento de la OCM, los responsables de UPA-Uce han manifestado que no están plenamente satisfechos ya que no se han recogido buena parte de las observaciones planteadas por el sector.
En concreto, algunos temas que inciden directamente en Extremadura y que perjudican a los viticultores de la región son, por una parte, la ayuda vinculada a la destilación de alcohol para uso de boca, que serán transitorias durante dos años. UPA-Uce no está de acuerdo con que, dependiendo de la cantidad que destilen las bodegas, los agricultores podrán cobrar la ayuda o no. Con esta medida se pone en manos de terceras personas un presupuesto muy importante para los viticultores en una región con tradición en estas destilaciones.
Por otra parte, UPA-Uce tampoco está de acuerdo con que, en el caso de que en una campaña determinada se tenga que aplicar la destilación de crisis, las ayudas se diferencien por regiones productoras, ya que ésta debería ser la misma independientemente de la región en cuestión. Así se está generando una situación de desigualdad entre los viticultores de diferentes regiones.
Otro de los puntos que trata el Real Decreto es el arranque. En Extremadura se ha puesto de manifiesto la intención de los agricultores de apostar por el sector ya que sólo se arrancarán 1.930 hectáreas de viña de las 43.000 que se arrancarán en toda España este año.
Ignacio Huertas también ha mostrado la preocupación de la Organización por la promoción en países terceros, ya que el 50% de la inversión debe asumirla el productor. La ayuda sólo representa el otro 50% del total del coste del proyecto de promoción, por lo que el sector no tiene capacidad de asumir esos costes y tendrá dificultad para aprovechar este presupuesto destinado a promoción.
En cuanto al dinero que la OCM trasladará a desarrollo rural, UPA-Uce exige que este dinero vaya a parar a los agricultores. Para ello, pedimos que se establezca en Extremadura una medida de apoyo a la producción ecológica de viñedo, porque consideramos que en nuestra región existe una superficie de viñedo tradicional muy importante donde se están haciendo prácticas que pueden ser consideradas de producción integrada y que hay que poner en valor.
Otra práctica habitual en Extremadura es el viñedo asociado a olivar, del que existen unas 19.000 hectáreas y que plantea un problema a la hora de cobrar las ayudas a las destilaciones, ya que la superficie es la misma para ambos cultivos. En este sentido, UPA-Uce insta a la Administración a que dé respuesta a esta situación que afecta a un gran número de viticultores extremeños.
Política de comentarios:
Tenemos tolerancia cero con el spam y con los comportamientos inapropiados. Agrodigital se reserva el derecho de eliminar sin previo aviso aquellos comentarios que no cumplan las normas que rigen esta sección.