El ministro de Agricultura, Luis Planas, ha explicado que, durante el turno en el que ostentará la presidencia de la Unión Europea, en el segundo semestre del año, España se propone avanzar en el debate y la toma de iniciativas para que la agricultura y la pesca comunitarias se encuentren en las mejores condiciones posibles para abordar sus retos de futuro, y progresar en la autonomía estratégica abierta.
Se da la particularidad de que se producirá en el periodo previo a la celebración de las próximas elecciones al Parlamento Europeo, previstas en primavera de 2024 y que supondrán la renovación del colegio de comisarios, con lo que se requerirá un esfuerzo añadido para cerrar aquellos expedientes en los que se han avanzado en presidencias anteriores.
Entre julio y diciembre se celebrarán 7 Consejos de Ministros de Agricultura y Pesca, dos de ellos de carácter informal que tendrán lugar en Vigo, en julio (temas pesqueros) y en Córdoba, en septiembre (temas agrarios), y que versarán sobre dos de los asuntos marcados con prioridad en la agenda del Gobierno español.
El consejo de Córdoba se centrará en las nuevas tecnologías como herramienta para una agricultura más resiliente frente al cambio climático, asunto que según ha destacado el ministro es fundamental para que el sector agrario español y europeo sea cada vez más competitivo y no pierda su posición a escala mundial.
El consejo de Vigo tendrá como asunto central la descarbonización del sector pesquero y las inversiones en sostenibilidad. El ministro ha reiterado la importancia de las inversiones en sostenibilidad, innovación y digitalización para propiciar la viabilidad económica de la flota pesquera.
Además, se ha programado un calendario con más de una veintena de reuniones y eventos que comenzarán en junio con la celebración del Congreso Mundial de la Viña y el Vino en Jerez y en Cádiz. También hay previstas reuniones informales de cargos de diverso rango de representatividad como directores generales, responsables de sanidad y bienestar animal y de sanidad vegetal. Habrá también conferencias de alto nivel sobre zonas rurales, de organismos pagadores y de directores de planes estratégicos nacionales de la Política Agraria Común (PAC).
Prioridades en agricultura y alimentación
Según ha relatado el ministro, las expectativas apuntan a que durante la presidencia española pueda cerrarse un acuerdo entre el Consejo y el Parlamento europeos sobre la modificación del reglamento de las Indicaciones Geográficas Protegidas. España lidera el grupo de amigos de esta figura del que forman parte 15 Estados miembros.
Uno de los principales objetivos de la presidencia española será dar un impulso al debate sobre las nuevas técnicas genómicas en la producción vegetal, que será uno de los temas a abordar en el Consejo de Córdoba, ya que, según el ministro, es un asunto que puede tener un importante peso en el objetivo de conseguir una agricultura resistente al cambio climático, que utilice menos recursos naturales como el agua, y menos productos fitosanitarios.
Igualmente, durante el último semestre del año se espera que la Comisión Europea presente la propuesta de revisión de la normativa sobre bienestar animal y sobre material reproductivo vegetal y forestal. El avance en la elaboración del reglamento sobre uso sostenible de los fitosanitarios está pendiente de la realización del estudio de impacto ambiental.
Otro asunto de gran trascendencia por su incidencia sobre los consumidores será la revisión del reglamento de información alimentaria facilitada al consumidor, que abarca desde la homogeneización de la normativa existente sobre la indicación del origen de los productos, el etiquetado nutricional, o la información que debe suministrarse en las etiquetas de las bebidas alcohólicas.
La Comisión Europea también debe presentar en el segundo semestre una propuesta legislativa sobre la iniciativa marco de sistemas alimentarios saludables.
Se conoce que la imposición de normas a la importaciones para que cumplan con los estándares de producción europeos (clausulas espejo) no figuran entre las prioridades de la presidencia española. Nuevas tecnologías, sostenibilidad, resiliencia… rediós que palabros, pero de evitar la competencia desleal que suponen las entrada de productos agrícolas y ganaderos de países terceros que no cumplen con las estrictas normativas que nos afectan a los productores de aquí, ni una palabra. Si la importación fuese de políticos que cumplen con su función con un coste para la sociedad mucho menor (que seguro que los hay ), verías como se ponían reivindicativos.