La producción de avellana con cáscara en Cataluña podría llegar a las 7.000 t para la campaña 2022-23, lo que sería un 39% superior a la del pasado año (5.044 t), que fue similar a la del anterior (5.587 toneladas). Las tres cosechas estarían muy lejos de las 12.371 toneladas de avellana caparazón de la campaña 2019-2020, y las dos últimas incluso se situaron bastante por debajo del 50% del potencial productivo de Catalunya, de acuerdo con los datos de la Federación de Cooperativas Agrarias de Cataluña (FCAC).
Josep Pere Colat, responsable de frutos secos de la FCAC, alerta de que “las dos campañas anteriores tuvimos problemas de polinización al coincidir episodios de precipitaciones y neblinas. Este año, la producción en las zonas de montaña se ha visto muy afectada por las heladas de abril. En las zonas de llanura, un verano excesivamente caluroso y largo, con temperaturas extremas de mayo a septiembre, junto a la falta de precipitaciones han perjudicado a la planta y al fruto. En avellana, el cambio climático ya es una realidad que nos preocupa y se evidencia en las últimas cosechas, haciendo aflorar nuevas enfermedades que afectan al cultivo”.
La FCAC valora muy positivamente la actuación del gobierno turco que, mediante su organismo de intervención TMO (Turkish Grain Board) y pese a tener stocks de otras campañas pendientes de comercializar, aprobó compras de avellana en 52 y 53 libras turcas /kg caparazón, aportando estabilidad al mercado.
Aparte del cambio climático y los volúmenes de producción, la FCAC apunta que los actuales costes energéticos son también motivo de preocupación porque pueden tener repercusión tanto sobre las industrias de transformación como en las explotaciones agrarias. Durante la reunión también se expresará la preocupación por el estancamiento en el consumo mundial de avellana, a diferencia de otras producciones de frutos secos
En este contexto, la FCAC reclama a la Comisión Europea que, en el marco de la nueva PAC (Política Agraria Común), se priorice la producción europea. Asimismo, se solicita que las autoridades de Bruselas impulsen un esquema de cooperación entre la Unión Europea y Turquía en relación a la sanidad vegetal para dar respuesta al reto que supone la aparición de nuevas plagas en la producción de avellana y la diversidad de productos fitosanitarios que existen legalmente en cada ámbito geográfico para su control.
Política de comentarios:
Tenemos tolerancia cero con el spam y con los comportamientos inapropiados. Agrodigital se reserva el derecho de eliminar sin previo aviso aquellos comentarios que no cumplan las normas que rigen esta sección.