La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) denuncia que la propuesta del Ministerio de Agricultura para reformar las Organizaciones de Productores de Frutas y Hortalizas (OPFH) facilita el trasvase de ayudas públicas a fondos de inversión especulativos. OPFHs, con una importante vinculación con fondos de inversión como Miura o ProA Capital, han llegado a percibir en la última campaña hasta 4,7 millones de euros de los fondos de la Política Agraria Común (PAC) para el sector hortofrutícola.
La propuesta del MAPA de modificación del real decreto 532/2017 por el que se regulan el reconocimiento y el funcionamiento de las Organizaciones de Productores del sector de Frutas y Hortalizas (OPFH), en lo referente a los mínimos para el reconocimiento, únicamente se centra en elevar las cuantías de los mínimos de valor de producción comercializable, sin realizar cambios en los mínimos relativos al número de miembros. De esta manera, se beneficia en mayor medida a las OPFH vinculadas al comercio privado, empresas que se caracterizan por juntar a un número muy pequeño de productores mayores y con mayor Valor de la Producción Comercializada, frente a otras OPFH, como pueden ser las cooperativas, que realizan mayor esfuerzo por aglutinar a muchos pequeños productores y a las que les costaría más alcanzar la nueva cifra de mínimo VPC que un incremento del número mínimo de miembros.
Las OP con un mayor número de socios son las que tienen un mayor impacto redistributivo de las ayudas comunitarias y las que mejor orientan los fondos públicos hacia las pequeñas y medianas explotaciones, aquellas que más dificultades encuentran en el mercado y más necesitan el apoyo público. “El modelo de producción de grandes conglomerados empresariales, participados con fondos de inversión, y que se benefician de dinero público es más que cuestionable: el trasvase de presupuesto público a los beneficios de los accionistas y no a la realidad productiva que genera economía y empleo en el medio rural será poco comprensible para el contribuyente europeo y puede poner en riesgo la financiación conjunta del sistema de OPFH”, ha subrayado Andrés Góngora, responsable del sector de frutas y hortalizas de COAG.
Basta con chequear el listado de entidades beneficiarias para las ayudas al sector en el ejercicio 2021, y publicado por el FEGA, para comprobar cómo, en los primeros puestos, aparecen mezcladas OPFH con un número de socios superior al millar, que están haciendo un gran esfuerzo por concentrar oferta y mejorar la posición negociadora de los productores, con otras entidades con un reducido número de dueños, participadas o propiedad de fondos de inversión, “que están percibiendo cuantiosas ayudas públicas para pagar dividendos de accionistas, y no realizan ni por asomo el mismo esfuerzo en concentración de la oferta, sino que además pueden estar ayudando a dispersar dicho esfuerzo”, ha afirmado Góngora.
No es tan fácil. Es muy complicado.Todo tiene sus ventajas e inconvenientes. Lo justo sería conseguir una Agricultura real que sobraran las subvenciones y no se consigue por culpa de todos.
Si pero a pagarlo siempre los mismos