El Ministerio de Agricultura (Mapama) está trabajando en un borrador de Real Decreto que regulará los controles sanitarios de la leche. Una de las novedades de este borrador es que propone que las muestras de leche sean analizadas por los transportistas en la propia explotación. Actualmente, el transportista solo recoge la muestra correspondiente y la envía al laboratorio interprofesional al que pertenece.
Para la Federación Rural Galega-FRUGA, esta nueva norma puede poner en peligro a las pequeñas explotaciones. Consideran que si el transportista tiene que analizar la leche en la explotación antes de cargarla en el camión, cada parada va a ser mucho más larga. Calculan que el transportista va a verse forzado a detenerse una media de 30 minutos en cada parada. En consecuencia, los tiempos de recolección van a ser más largos, impidiendo en algunos casos, completar toda la ruta. Esto podría implicar que las industrias decidieran dejar de recoger a las explotaciones más pequeñas o las de más difícil acceso con el fin de agilizar la ruta de recogida. Además, podría suponer un incremento en los costes de recogida y los ganaderos temen que la industria se los repercuta a través de bajada de precios, que ya de por sí, son bajos.
Galicia cuenta con 7.900 explotaciones lecheras, mayoritariamente de carácter familiar y repartidas por las comarcas gallegas.
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