La venta de tractores agrícolas nuevos, en el periodo de enero a septiembre, se ha incrementado en la provincia de León en un 22,8% respecto al mismo periodo del año anterior. Esta tendencia es también positiva fuera de la provincia, pero el crecimiento es más moderado, así en el conjunto de Castilla y León ha crecido el 8,14% y en el conjunto del país el 11,02%. Otro dato significativo es el peso de la provincia de León en el conjunto de la autonomía, y así, mientras que en el periodo enero a septiembre de 2015 en León se matricularon el 14,5% de todos los tractores de Castilla y León, en el mismo periodo de 2016 los tractores matriculados en León representan el 16,47%. En la provincia se han matriculado 145 tractores, por lo tanto, cuando finalice el año y se computen doce meses, se habrá sobrepasado la cifra de tractores matriculados en el año 2015, que fue de 159, un mal año en la venta de tractores, ya que en la provincia se vienen matriculando anualmente una media de 205 de estas máquinas.

ASAJA de León no encuentra una explicación lógica al incremento de las ventas en una año tan complicado agrícolamente, pues si bien la cosecha de secano en cereales y forrajes fue mejor, los bajos precios han situado la rentabilidad en niveles parecidos al año 2015. Además, en una provincia como la de León, con un importante peso de la agricultura de regadío basada en el maíz, las expectativas de cosecha y de precios, a las puertas de la recolección, son muy pesimistas. Tampoco ha mejorado el sector del vacuno de leche, donde la provincia tiene un peso del 30% sobre el conjunto de la autonomía, y por el contrario ha entrado en crisis también el ovino de leche, un sector de un importante peso cuantitativo en León.

En opinión de ASAJA, la explicación más razonable a este incremento en la compra de tractores hay que buscarla en la necesidad constante de renovar el parque de maquinaria, y en las mayores facilidades de financiación por parte de la banca comercial y de las financieras de las principales marcas.