La lana es más resistente al fuego que las fibras sintéticas. Quema con una llama que se extingue por si sola y produce una ceniza que se disipa y no se acumula en las heridas. No obstante, estas propiedades de resistencia al fuego han podido incrementarse a través de un material resistente al calor, desarrollado y patentado por científicos del Instituto de Investigación Agraria de EEUU (ARS). Dicho material puede incorporarse a la lana y producir un tejido resistente al fuego, ideal para los uniformes de los bomberos. Este material también se puede incorporar a otras fibras, pero el resultado es mejor con la lana por su resistencia natural a la llama.
En un proyecto previo, los investigadores habían desarrollado una lana con un acabado pulido, que era lavable y no picaba. Dicha lana se mejoró con un tratamiento a base de un polímero resistente al calor, que es estable, fácil de procesar y altamente tolerable a las temperaturas extremas. Además, este material desarrollado por el ARS no utiliza el metal pesado circonium, que puede provocar riesgos para la salud durante el procesado.
En pruebas iniciales se ha comprobado que el comportamiento de lana tratada con el polímero desarrollado por el ARS cuando se quemaba era comparable a una mezcla al 50% de lana y Nomex (el producto actualmente usado en la los unifrmes de los bomberos).
En EEUU se producen unos 18.000 tn de lana cruda al año. El principal consumidor de lana domestica es el ejército de EEUU y otros Cuerpos de la Ley y el Orden en los que se exige que los uniformes se fabriquen con lana producida en EEUU.
Política de comentarios:
Tenemos tolerancia cero con el spam y con los comportamientos inapropiados. Agrodigital se reserva el derecho de eliminar sin previo aviso aquellos comentarios que no cumplan las normas que rigen esta sección.