Sevilla, 6 de Julio de 2006 (2 páginas). La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos, UPA-Andalucía, rechaza la propuesta “ultraliberal” de reforma de la OCM del Vino que la Comisaria de Agricultura de la UE, Mariann Fischler-Böel, presentó el pasado Miércoles, 4 de Julio. En una primera valoración de las pérdidas, UPA-A prevé el abandono de la actividad de miles de explotaciones vitivinícolas de Andalucía y la imposibilidad de producir vinos de calidad porque no estarán claramente diferenciados en el mercado. Entre las medidas propuestas, Andalucía se verá especialmente afectada por la eliminación de las ayudas a la destilación —de los que se beneficiaban hasta ahora nuestro brandies del Marco de Jerez—, sobre todo para el alcohol para uso de boca, que restará a nuestra tierra 5 Millones de € anuales, a lo que habría que añadir la eliminación de los apoyos comunitarios al almacenamiento privado, que recortarán las subvenciones en cerca de 600.000 € al año, y el arranque de cepas. La propia Comisión reconoce en su estudio de impacto el fuerte descenso que ocasionará en el empleo dentro del sector.
La desaparición de viñedos afectará principalmente a Montilla-Moriles, en Córdoba y Condado de Huelva, donde el tamaño medio de las explotaciones es muy reducido. Se trata de un sistema productivo caracterizado aquí por vides envejecidas, con escasa mecanización y reconversión varietal y productores en su mayoría mayores de 55 años. Así las cosas, en Córdoba existe el riesgo de que abandonen la actividad, según los cálculos iniciales de UPA-Andalucía, unas 4.000 hectáreas, lo que representa el 50% del total. En Huelva, la pérdida de cepas podría alcanzar a una cuarta parte de su superficie de cultivo, unas 1.150 hectáreas, aunque el arranque no será masivo debido al papel medioambiental y sostenible que juega este sector por su cercanía el Espacio Natural de Doñana. En este caso, UPA-A solicita que en el nuevo Plan de Desarrollo Rural (PDR) se incluya una ayuda agroambiental que garantice la viabilidad de los caldos del Condado de Huelva, que están alcanzando poco a poco una gran aceptación y reconocimiento en los mercados en los últimos años.
Pero no son lo únicos efectos negativos de la propuesta, que contempla aspectos preocupantes como la liberalización de plantaciones para 2014; la transferencia de presupuesto de la OCM del vino a medidas de desarrollo rural que beneficiarán a otros colectivos, pero no a los viticultores; así como un nuevo sistema de etiquetado que confunde al consumidor y no diferencia los vinos de mesa y los de denominación de origen.
Frente a esta propuesta, UPA-A apuesta por un mantenimiento del presupuesto histórico para nuestras viñas en función de los últimos años, la libertad de gasto dentro de los “sobres nacionales” con objeto de poder incluir apoyos a la destilación de alcohol de uso de boca o a la elaboración de mostos; la posibilidad (no obligatoriedad) de incluir medidas de desarrollo rural pero siempre en función de los intereses de los países y por tanto dentro de los sobres nacionales; el planteamiento de medidas de promoción a países terceros pero como medida horizontal no obligatoria dentro de los “sobres nacionales”; el mantenimiento de los derechos de plantación; y la defensa y potenciación de los vinos de calidad dentro del contexto europeo e internacional.
UPA-A desplegará una intensa acción sindical para defender los intereses de las explotaciones de carácter familiar.
Política de comentarios:
Tenemos tolerancia cero con el spam y con los comportamientos inapropiados. Agrodigital se reserva el derecho de eliminar sin previo aviso aquellos comentarios que no cumplan las normas que rigen esta sección.