A finales del pasado año los integrantes de la Asociación Interprofesional de la Pera y la Manzana (AIPEMA) decidieron su cierre y disolución. Esta organización fue creada en 1998 y se trata de la primera organización interprofesional agroalimentaria creada al amparo de la Ley 38/94 que desaparece como tal. La disolución se ha debido al parecer a problemas financieros, especialmente la pérdida del apoyo económico de la Generalitat calatana (la sede de la AIPEMA estaba en Lérida).
Este cierre podría preceder a alguno de las otras organizaciones interprofesionales que están en situación precaria, ya que son varias las que se encuentran en una situación similar de vacío de contenidos, indiferencia de sus integrantes, y que han agotado las posibilidades de apoyo de las administraciones.
En la segunda mitad de los años 90 se produjo un auge en la creación de organizaciones interprofesionales agroalimentarias fomentado por el Ministerio de Agricultura. Estos organismos se veían entonces como una herramienta para vertebrar sectores de la producción agraria que contaban con escasa organización. La realidad con el paso de los años es que las interprofesionales que mantienen dinamismo son solamente algunas de las que se dedican primordialmente a labores de promoción.
Muy poco han servido las interprofesionales de la Ley 38/94 para el objetivo proclamado en su momento de “vertebrar” el sector ni para regular las relaciones comerciales, y mucho menos los precios, algo que por lo demás está expresamente prohibido por la Ley. Algunos tímidos intentos en el sentido de una cierta ordenación de algunos aspectos de tipo comercial se han encontrado siempre con la oposición de las autoridades de defensa de la competencia.
Política de comentarios:
Tenemos tolerancia cero con el spam y con los comportamientos inapropiados. Agrodigital se reserva el derecho de eliminar sin previo aviso aquellos comentarios que no cumplan las normas que rigen esta sección.