El problema no es nuevo, y campaña tras campaña ASAJA viene denunciando que el sistema tiene una perversidad y un error de planteamiento que la Administración no acaba de resolver.
Los agricultores tienen como referencia oficial y única para declaración de las superficies aquellas que constan en sus Catastros, por los que pagan sus contribuciones y rigen toda la relación con la Administración a todos los efectos. No se entiende como declarando con el rigor que marca el Catastro, luego si la Teledetección dice otra cosa, se persigue al agricultor como si de un delincuente se tratara.
La consecuencia económica de este desajuste supone para el Alto Aragón, en un sector tan mermado como el agrario, una sangría inadmisible, a la que se añade la indefensión del agricultor que considera una auténtica lotería coincidir su declaración con la medición que posteriormente hará el satélite de la Teledetección.
Una cosa es perseguir el fraude y ASAJA apoyará siempre todos los mecanismos que instale la Administración con ese objetivo y otra sembrar incertidumbre y malestar en profesionales que declaran lo que conocen y se rigen por documentos oficiales que la propia administración les ha facilitado como es el Catastro.
ASAJA se ha dirigido a la Consejería de Agricultura de la DGA para dar solución a multitud de requerimientos que se están haciendo a los agricultores e intentar que esta situación no se repita a futuro.
Política de comentarios:
Tenemos tolerancia cero con el spam y con los comportamientos inapropiados. Agrodigital se reserva el derecho de eliminar sin previo aviso aquellos comentarios que no cumplan las normas que rigen esta sección.